No. Basta. Detente. Detengámosnos.
Tengo miedo, mucho, otra vez y trato de evitarlo
pero es inevitable, llega y se queda en mí,
no sé manejarlo...
Estás en todas mis horas, eso me asusta,
no tengo herramientas para defenderme,
no me quedan ánimos para avanzar.
Dopamina, maldita dopamina
estoy drogada, peligrosamente dopada,
y no, no es positivo...
Voy a parar, me tengo que detener
Debo olvidar todo esto,
no quiero, no puedo, no debo
soy enfermamente frágil,
tengo que cuidarme de estas amenazas.
Sí, me siento amenazada, no sirvo para esto
y no sé si quiero servir,
ha pasado muchas veces
ya me sé todos los finales no felices
y no quiero más de eso,
ya sé, no me quedan lágrimas en el repertorio para llorar.
Perdón, no puedo,
ni ahora ni nunca,
no puedes calmarme, nadie puede,
nadie puede sanar las heridas
nadie puede despejar mis temores
Perdón,
soy demasiado cobarde para todo esto
el miedo me paraliza,
mi tendencia a complicarlo todo
es más fuerte, mucho más.
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